Entonces Jesús, compadecido, les tocó los ojos, y en seguida recibieron la vista; y le siguieron.(S. Mateo 20:34)
No hay duda alguna que los oídos del Señor están prestos para oír el clamor de sus hijos. Que nadie calme o haga callar ese clamor, sigue llamando, sigue pidiendo, sigue tocando que Dios te escucha. Y te puedo asegurar que la compasión, va mover su mano y va obrar el milagro. Pero que haces al recibir el milagro?. Conozco muchas personas que clamaron, Dios les respondió y hoy están con una pareja, un negocio, un trabajo, estudios, sanos y prósperos pero apartados de Dios. Que nosotros seamos como aquellos ciegos que recibieron la vista, que decidieron seguirlo a Jesús. Es que si lo seguís, no solamente vas a recibir un sólo milagro, sino vas a recibir muchos más, al lado del hacedor de maravillas. Hoy elijo seguirlo y vos que decidiste?
No hay duda alguna que los oídos del Señor están prestos para oír el clamor de sus hijos. Que nadie calme o haga callar ese clamor, sigue llamando, sigue pidiendo, sigue tocando que Dios te escucha. Y te puedo asegurar que la compasión, va mover su mano y va obrar el milagro. Pero que haces al recibir el milagro?. Conozco muchas personas que clamaron, Dios les respondió y hoy están con una pareja, un negocio, un trabajo, estudios, sanos y prósperos pero apartados de Dios. Que nosotros seamos como aquellos ciegos que recibieron la vista, que decidieron seguirlo a Jesús. Es que si lo seguís, no solamente vas a recibir un sólo milagro, sino vas a recibir muchos más, al lado del hacedor de maravillas. Hoy elijo seguirlo y vos que decidiste?
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