EL DÍA DESPUÉS DE

Mientras Eliseo decía esto, el mensajero llegó, y el rey dijo: —¡Todo este sufrimiento viene del Señor ! ¿Por qué seguiré esperando al Señor ?Eliseo le respondió: —¡Escucha el mensaje del Señor ! Esto dice el Señor : “Mañana, a esta hora, en los mercados de Samaria, siete litros de harina selecta costarán apenas una pieza de plata y catorce litros de grano de cebada costarán apenas una pieza de plata ”. El funcionario que atendía al rey le dijo al hombre de Dios: —¡Eso sería imposible aunque el Señor abriera las ventanas del cielo! Pero Eliseo le respondió: —¡Lo verás con tus propios ojos, pero no podrás comer nada de eso!(2 Reyes 6:33; 7:1‭-‬2 NTV)

Hubo un terrible periodo de hambruna en la tierra de Samaria por cuanto sus enemigos rodearon la ciudad. Por ende lo que se vendía en el mercado era de altísimo costo. No digo que se está viviendo, hoy, lo mismo en la medida e intensidad que lo vivió Samaria en aquel entonces pero la biblia siempre me mostró y enseñó que después del pecado vino el perdón, de la imposibilidad vino el milagro, del diluvio vino el arcoíris, del desierto vino la tierra prometida, de la sed vino el agua aún de las rocas y después del hambre siempre vino pan incluso de los cielos. Por esto, sé que esta situación terminará con abundancia de recursos y de pan. Si lo crees lo vas a vivir pero si no, lo vas a ver con tus propios ojos pero no podrás comer nada de ello. Aquel funcionario del rey finalmente murió atropellado por la multitud el día en que se estaba cumpliendo lo declarado por el profeta: lo vio pero no lo disfrutó.