Por tanto, ahora dirás a mi siervo David: “Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Yo te tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueras príncipe sobre mi pueblo Israel.(1 Crónicas 17:7)
Dios sigue tomando a las personas de detrás de las ovejas, aquellas que incluso a los ojos de su propia familia son insignificante, por conocer el corazón humilde que tienen. Nunca podremos impresionar a un Dios soberano que todo lo sabe. Los mejores candidatos a ocupar cargos de autoridad de parte de Dios, son aquellos que son mansos y humildes de corazón, aquellos que harán todo lo que Dios desea.
Y aunque la gente de este mundo piensa que ustedes son tontos y no tienen importancia, Dios los eligió, para que los que se creen sabios entiendan que no saben nada. Dios eligió a los que, desde el punto de vista humano, son débiles, despreciables y de poca importancia, para que los que se creen muy importantes se den cuenta de que en realidad no lo son. Así, Dios ha demostrado que, en realidad, esa gente no vale nada. Por eso, ante Dios, nadie tiene de qué sentirse orgulloso.(1 Corintios 1:27-29 TLA)
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