Más bien, vístanse con la presencia del Señor Jesucristo. Y no se permitan pensar en formas de complacer los malos deseos.(Romanos 13:14 NTV).
Cuando nos vestimos con una determinada ropa, la misma nos sirve primeramente para cubrir partes de nuestro cuerpo, pero a la par se visualiza de forma externa, es decir que nuestra ropa es un medio de lo que nosotros cubrimos y lo que las personas lo ven. Nuestras ropa entre el pensamiento y las acciones son trasparentes, no por mucho tiempo vas a esconder o tapar eso. En este versículo nuestro compañero Pablo, nos exhorta a que nos vistamos de la presencia del Señor Jesucristo, gracias a su sacrificio perfecto en la cruz, se cubre completamente la naturaleza pecaminosa y ahora somos deudores del Espíritu y reflejamos a Cristo. Vestite de la presencia de Jesús todos los días y tu vida reflejara su amor a las personas. Es un ropaje no muy fácil de conseguir porque demanda de nosotros tiempo de calidad en su presencia, por eso muy pocos son los que lo lucen. Que tus pensamientos sean de continuo la presencia de Dios.
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