Porque ¿quién soy yo y quién es mi pueblo, para que pudiéramos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos.(1 Crónicas 29:14)
Es necesario reconocer la fuente de donde brota verdaderamente todas las cosas, sean las intangibles o materiales que hoy tenes, pero me podes decir: en realidad soy yo el que se esforzó, trabajo y no falte ningún día al lugar laboral y rematan con la frase, esto es el fruto de mi sacrificio y del sudor de mi frente; a lo que la biblia puede decirte en Deuteronomio 8:18 NTV: Acuérdate del Señor tu Dios. Él es quien te da las fuerzas para obtener riquezas...Se afirma una vez mas ésta gran verdad en su palabra a través de Juan, en el libro que lleva su nombre en el capítulo 3:27 "Respondió Juan: —No puede el hombre recibir nada a menos que le sea dado del cielo."
Acuérdate del Señor tu Dios, fuente inagotable de todo lo que verdaderamente necesitas y mucho mas.
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