En el ámbito económico, el tributo es entendido como un tipo de aportación que los ciudadanos deben pagar al Estado, (en este caso, extranjeros al rey Salomón) para que este lo redistribuya de manera equitativa o de acuerdo a las necesidades del momento. De la misma forma en lo espiritual, sabiendo que hay pensamientos o acciones que Dios determinó que lo exterminemos (hacer desaparecer totalmente), porque al final de cuentas nos afecta o afectará en un futuro e inclusive la eternidad, pero nosotros los hicimos nuestros tributarios, de manera que ellos aportan algo a nuestra vida y lo usamos según las necesidades del momento. Por eso es que en San Marcos en el capitulo 9 dice: Si tu mano te es ocasión de caer, córtala; si tu pie te es ocasión de caer, córtalo; si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo; porque mejor te es entrar en la vida manco,cojo o con un ojo que teniendo los otros en el infierno, al fuego que no puede ser apagado, donde el gusano de ellos no muere y el fuego nunca se apaga. Cuidado con hacer tributarios tuyos a lo que tus manos tocan, a donde tus pies se dirigen o los lugares donde visitas y a los que tus ojos hoy ven, mejor arrenpientete y entra en la vida eterna siendo radical, con las ordenes de exterminio que Dios mencionó en su Palabra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario